Homenajes merecidos… JAVITO BARBA
Resulta imposible encontrar a nadie que pueda hablar mal de Javito Barba, un tipo fantástico que fue también un excelente extremo derecho durante su trayectoria deportiva. Un jugador de enorme clase que demostró capacidad para jugar en la élite y sobre todo que la tenacidad es toda una virtud que se acaba desarrollando a medida que la vida te golpea. Y es que tuvo lesiones muy graves de rodillas que hubieran derrotado al más osado, pero que no pudieron con nuestro buen amigo.
En este caso es su ex compañero en el Club Balonmano Alcobendas y buen amigo, Mikel Muñoz, quien nos escribe unas líneas a modo de prólogo…
“Javito es uno de esos extremos zurdos con magia en su muñeca, de esos que no necesitaba mucho espacio para marcar. Forjado en la cantera de Alcobendas siempre destacó por su “bote”, y es que más que saltar, volaba. Como no acordarse de aquellos entrenamientos de flies…
No tardo en destacar y subir al primer equipo, luego voló también para terminar de hacerse y militó en las filas de Aranda de Duero donde consiguió el ascenso a Asobal, el Bm Guadalajara o el Octavio de Vigo para regresar donde todo empezó, en el Club Balonmano Alcobendas.
Todo un seguro desde la esquina y todo un profesional como jugador, pero pese a ser todo un ejemplo, su faceta deportiva se queda a años luz de su categoría como persona. Siempre ha sido un buen espejo en el que mirarse dentro y fuera de las pistas, y un tipo del que día a día se aprendía algo nuevo.”
Javito nos relata su vida deportiva recordando los equipos por los que pasó, y donde como no, dejó una gran huella como jugador, compañero y amigo:
“Todo empezó en el colegio, como tantos y tantos jugadores, y en Alcobendas, la ciudad donde he vivido la mayor parte de mi vida. A los 8 años de edad ya formaba parte del Balonmano Alcobendas en donde pasé por todas las categorías inferiores del club hasta los 19 años. A esa edad, con toda la ilusión del mundo ya vi que el camino no era como me lo habían pintado desde pequeño, sufrí una rotura de ligamento cruzado anterior y que me costó recuperar más de lo previsto. Tras la recuperación y conseguir el ascenso a Liga ASOBAL con el Bm Alcobendas finalizó mi primera etapa en este club.
A los 19 años fui a parar al Bm Guadalajara, donde estuve una temporada y donde deportivamente no fui capaz de disfrutar, ni de demostrar porqué estaba ahí, era la primera temporada del club en División de Honor Plata y llegamos a jugar la Fase de Ascenso a Liga Asobal.
Al año siguiente fui al Bm Villa de Aranda, sin duda la etapa que recuerdo con más cariño. Fueron tres años donde pasamos de luchar por no descender a jugar la Fase de Ascenso, que a posteriori le dio la plaza para jugar en la máxima categoría al Club.
Después de esta etapa y aunque sonará extraño, me tomé un año fuera de las pistas ya que no me encontraba con motivación para seguir y necesitaba hacer cosas diferentes, sobre todo dar un empujón a mi vida académica y hacer curriculum de cara al futuro. Tras ese año y sabiendo que no iba a ser fácil conseguí volver a jugar en División de Honor Plata, en esta ocasión en el Academia Octavio de Vigo, una temporada que tampoco fue fácil ya que el Club no estaba en su mejor momento y porque desgraciadamente me volví a lesionar del ligamento cruzado anterior, en este caso de la otra rodilla.
Tras la rehabilitación volví a jugar en el club donde había crecido, en el Bm Alcobendas donde he estado hasta que decidí dejar la práctica activa del balonmano.
Una vida deportiva corta pero intensa, que me ha permitido conocer mucha gente y disfrutar de algo que no todo el mundo puede, aunque estoy seguro de que si volviera atrás no dejaría todo por el balonmano como lo hice y trataría de entrenar menos y estudiar más.
No soy el ex jugador típico que sigue relacionado con el balonmano de una u otra manera ya que en los 3 años que llevo sin jugar he visto un único partido de balonmano, y mentiría si no dijera que fui por compromiso.
Actualmente tengo mi pequeño negocio en Galapagar, un centro de entrenamiento donde sigo ligado al mundo del deporte, que es lo que verdaderamente me gusta, pero desde un punto de vista más lúdico y saludable que cuando estaba pensando 24/7 en el partido del sábado.
Y no quisiera terminar sin aprovechar esta oportunidad que me da BalonmanoVeteranos.com para dar las gracias a tod@s los que os habéis cruzado en mi camino y en especial al Dr. César Flores ya que gracias a él puedo seguir disfrutando del deporte como si nada hubiese pasado en mis rodillas.”
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