Historias de héroes anónimos… MICKY
Nuestro héroe de hoy es más bien un superhéroe, porque sino es dificilmente entendible que prácticamente a las puertas de las 60 primaveras, siga teniendo cuerda para seguir recorriendo la banda izquierda con una enorme sonrisa de felicidad en la cara.
Miguel Angel Subirats, más conocido en el mundo del balonmano veterano como Micky, es un incombustible que sigue irradiando amor por el balonmano; es todo un ejemplo de pasión y entusiasmo por nuestro deporte, y el espejo en el que mirarse.
Pocos tíos más simpatico, más compañero y más amigo te puedes encontrar en un torneo de veteranos en nuestro país. Enormemente querido, siempre tiene ese ratito de charla y conversación amable para departir sobre las aventuras y desventuras del 40×20. Un tipo entrañable que se hace querer con esa honestidad, esa amabilidad y ese trato cercano.
Toda una vida vinculado al balonmano, básicamanete en su C.H. San Fost, y ahi sigue… demostrando que esta locura se puede llevar hasta donde uno quiera. Y es que Micky no solo juega la Liga Máster de Cataluña, sino que te lo puedes encontrar en casi cualquier torneo de veteranos en España, y fuera de nuestras fronteras.
Llevamos muchas semanas detrás de él para poder contar su historia, y nos ha costado que se pusiera a recordar desde el blanco y negro de sus inicios al Full HD de la actualidad, pero por fin tenemos su trayectoria de su puño y letra:
“Mi relación con el balonmano empezó a finales de los 60 en el club de mi pueblo, Sant Fost de Campsentelles. Por entonces, con 9 años, inicié mi andadura en el equipo alevín como central, si bien lo que realmente me gustaba era ser portero. Así que mi oportunidad llegó cuando en infantiles pasé a sustituir al portero titular que, afortunadamente para mi, decidió cambiar de deporte y pasarse al fútbol.
Fue en el último año de juvenil cuando una lesión de muñeca, y por prescripción médica, tuve que colgar las coquilleras y transformarme en el extremo izquierdo del 2º equipo. No fue hasta la temporada 80-81 que empecé a entrenar con el 1ª Nacional que, a falta de 5 partidos para terminar la liga, ya estaban clasificados para la fase de ascenso a División de Honor. Así que el entrenador decide que en el partido contra el Gavà será un buen momento para mi debut con el primer equipo.
El equipo alcanza el mayor éxito de nuestro club y asciende a la máxima categoría, que para un pueblo de 3000 habitantes por aquel entonces era toda una proeza. En la temporada 81-82 soy oficialmente jugador del equipo de División de Honor, debutando en la máxima categoría en Málaga contra el Caja de Ronda. No llegué a ser jugador titular pero pude jugar algunos partidos contra equipos como el Bidasoa, Tecnisan y At. de Madrid entre otros. Cuando llegó el final de temporada, el gran Ángel Costa (alma máter del balonmano en Sant Fost por aquel entonces y alcalde del pueblo) me convocó en su despacho “oval” para aconsejarme que me fuera cedido una temporada a La Salle Montcada, equipo de 2ª Nacional, y así adquirir más experiencia para volver al año siguiente. Hice caso del consejo y después de una muy buena temporada en Montcada me reclaman de nuevo en Sant Fost para jugar con el 1ª Nacional. En la primera temporada llegamos a la fase de ascenso, pero desgraciadamente no lo conseguimos. Fue en la temporada 84-85 cuando se logra el ascenso por segunda vez a División de Honor, quedando campeones de España de 1ª Nacional en Canarias, siendo los rivales el Ademar de León y Marlboro Canteras celebrado en Las Palmas de Gran Canarias.
Llega el momento de volver a jugar en División de Honor, pero problemas laborables impiden comprometerme para jugar en la máxima categoría, ya que la dedicación era máxima y me resultaba imposible cumplir con entrenamientos, desplazamientos etc., por lo que después de hablar con la Directiva me proponen jugar con el segundo equipo donde jugaría con compañeros con los que ya había coincidido en las categorías inferiores (Tari, Safa…) y así logramos el ascenso a 2ª Nacional. El trabajo sigue siendo un impedimento para seguir jugando, así que después de ese año dejo el balonmano, recibiendo por parte de mi club un homenaje conjuntamente con dos compañeros más.
Un año apartado del balonmano y en la temporada 1987-1988 vuelvo a jugar, pero esta vez ficho por el equipo de Martorelles (un pueblo al lado mismo de Sant Fost) reencontrándome con antiguos compañeros. Después de tres temporadas en 2ª Nacional, una lesión y posterior operación de menisco fue el motivo que hizo que dejara definitivamente el balonmano.
Desgraciadamente el Club Sant Fost había desaparecido por problemas económicos, pero en el año 2000 se vuelve a crear, así que decido reengancharme y con 41 años aún pude participar en algún partido de categoría autonómica. Y llega el año 2002, año en que se crea la primera liga autonómica por entonces llamada liga de veteranos (actualmente Lliga Màsters masculina) y como quien no quiere la cosa, llevamos ya 17 temporadas disfrutando de nuestro amado deporte. En este tiempo hemos llegado a 2 finales de Copa y a tres semifinales de Liga. En este momento estamos en semifinales que con una media de edad de 50 años… no esta nada mal. En el año 2011 empezamos a jugar en torneos fuera de nuestra comunidad y nos desplazamos a Puerto de Sagunto para participar en el torneo Locos del Balonmano, donde después de 7 ediciones haciendo amistad con la gente del Puerto (Toni, Gaba, Cesar, Reyes, Landete y mas) hemos llegado a juntarnos para jugar el torneo de Sevilla durante 4 años con el nombre de Puertofost. Y por fin el pasado año pude disfrutar en un Europeo, celebrado en Innsbruck (Austria), con mi equipo del alma, Sant Fost. Hicimos un gran papel en la categoría de +45, quedando en una meritoria 9ª posición, después de ganar 4 partidos y perder 2.
En la actualidad continuo jugando la liga master de Cataluña y como este año no se celebra un europeo, nos desplazamos a jugar un torneo internacional en Portimao ( Portugal). Después de la experiencia de Locos del Balonmano, nos animamos y decidimos organizar nuestro propio torneo de veteranos dedicado al ya nombrado y tan estimado Àngel Costa, uno de los fundadores del club. Pudimos disfrutar de su presencia durante varias ediciones, pero por desgracia el año pasado nos dejó. Lo que es seguro es que seguiremos recordándole con mucho cariño y respeto en el ahora Memorial Àngel Costa. En este torneo intentamos que vengan los equipos punteros de nuestra liga, juntamente con nuestros amigos del Puerto de Sagunto que no han fallado ningún año desde que se inició. Han participado, entre otros, equipos como los veteranos del FC Barcelona y nuestros amigos de Móstoles. Y si todo va bien, en la próxima edición contaremos con la participación de los estimados veteranos de Sevilla.
En el año 2015 fuimos invitados a jugar el campeonato de España que se celebró en Palautordera, quedando clasificados en séptimo lugar. En 2016 jugué al campeonato de España en Lugo conjuntamente con jugadores de Palautordera, en 2017 en Zaragoza y el año pasado en Pamplona. También he tenido el placer, conjuntamente con el entrenador del Sant Fost (Jordi Nogueras), de seleccionar y organizar la Selección Catalana de veteranos. Para los actos del 75 aniversario de la sección de balonmano del F.C.Barcelona, la Federación Catalana propuso crear una selección Master que jugó el año pasado contra el Barça, volviéndose a repetir el enfrentamiento este año para la clausura de los actos.
Está claro que el balonmano me apasiona, así que también formo parte del equipo del CAT+45, un equipo que se creó para jugar en el Europeo de Berga y que lo forman jugadores de diferentes equipos de la liga de Cataluña. En el 2015 pude participar en los Máster Games en Niza en la categoría de +45, en 2016 el europeo de Porec (Croacia) en la categoría de +45 y en el año 2017 en Gondomar (Portugal) en la categoría + 50, y espero seguir formando parte también de este equipo.
Como veterano también he participado en algún torneo de playa, si bien considero que para mi edad es muy complicado, ya no tengo las rodillas para el giro o el fly.
Mi faceta de directivo empezó en el año 2004-2005 donde el presidente del club (antiguo compañero) me pide que entre en la junta, así que empiezo como vocal llevando la parte de los veteranos. El club vuelve a estar a punto de desaparecer por problemas económicos, así que con unos cuantos jugadores veteranos nos hacemos con las riendas del club y paso a ser vicepresidente en ese momento. En 2010 celebramos los 50 años del club volviendo a reunir a ex-jugadores de todas las épocas y contando con la presencia de los cuatro fundadores del club. En el año 2012 la presidenta decide dimitir y en ese momentos asumo la presidencia. Conseguimos sanear el club y pasamos a tener un equipo en cada categoría donde hacia años que no se conseguía. La temporada pasada, ya un poco cansado de llevar tanta responsabilidad, decido dejar la presidencia convocando unas elecciones por primera vez en la historia del club, y en estos momentos, sin tener un cargo alguno, sigo vinculado y ayudando a la actual directiva.
Y para finalizar esta pequeña historia de mi vida con en el balonmano decir que, con casi sesenta años que cumpliré el mes de octubre, sigo jugando y disfrutando de este maravilloso deporte. Y no quiero terminar sin decir que tengo la suerte de formar parte de un gran equipo de veteranos y mejores personas en San Fost, donde es un verdadero placer compartir vestuario, cenas, buenos momentos y amistad…
Veteranooos!!! Uuu!!! Aaa!
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