Historias de Héroes Anónimos… MANUEL HERRAIZ
Cuenca tiene una de las mejores aficiones de nuestro balonmano, con un pabellón como El Sargal que cada día de partido se convierte en una fiesta desde por la mañana y hasta bastante después de terminar los partidos. En su gradas encontramos a fervorosos amantes de nuestro deporte, pero sobre todo de su equipo y su ciudad, y uno de los más ilustres es sin lugar a dudas Manuel Herraiz, miembro de la Peña Furia Conquense.
Su idilio con el balonmano comenzó a una edad muy temprana, y aunque su destino no estaba escrito para la élite, ha sabido disfrutar de las otras muchas cosas que ofrece este bendito deporte cuando lo afrontas desde una perspectiva más lúdica. Muchos amigos con los que ha compartido vestuario, y muchas amistades también en los equipos rivales porque Manuel, sobre todas las cosas, es un tio cercano y despreocupado que brinda su amistad a quien realmente quiera disfrutar de una persona honesta y sin dobleces. Alguien con quien siempre merece la pena echarse unas cervezas y hablar de balonmano… del pasado, del presente, y hasta del futuro de nuestro deporte.
Pero será mejor que sea él mismo quien nos relate su vida en un 40×20, aunque no quiero dejar pasar la oportunidad de resaltar que desde hace años se ha convertido en ese tipo de aficionados que no solo se deja la voz y las palmas en los partidos en Cuenca, sino que viaja muy a menudo, por España y por Europa como esta temporada pasada, para que los jugadores sientan un poquito de ese ambiente tan especial de El Sargal cuando defienden los colores conquenses en otras latitudes.
“Buenas a tod@s los aficionad@s al balonmano y sobre todo a los seguidores de BalonmanoVeteranos.com. Antes de nada no piensen ustedes que mi “historia” o mi andadura balonmanística es un viaje por diferentes equipos o ciudades, solo hay una ciudad… Cuenca, bueno, a excepción del de mi temporada de veteranos en Azuqueca, pero de eso hablaremos más tarde. Lo dicho, mis equipos han sido los dos equipos de la capital: Balonmano Cuenca y Balonmano Ciudad Encantada.
Mi toma de contacto con el balonmano comienza en mi último año de la EGB, cuando mi profesor de gimnasia Don Paco Checa, nos dice que tenemos que formar un equipo de balonmano para el Campeonato Interescuelas. Esto era para nosotros un lujazo porque suponía perder 30 minutos de clase para ir al Sargal a las 12:30 a entrenar los lunes y los miércoles, dentro del pabellón y jugar en el parqué. Recuerdo el primer partido de ese campeonato en el colegio “Santa Teresa” donde ganamos de 1 gol y tuvimos que salir corriendo porque nos querían pegar por haberles quitado la victoria en los últimos instantes. Por aquel entonces mi demarcación era la de lateral izquierdo.
Una enfermedad crónica, la diabetes, hace deje por unos años el balonmano y que retome su práctica ya en juveniles de la Sociedad Conquense, ahora llamado Liberbank Cuenca, entrenado por el “mítico” Bratislav Obucina “Bata”. En ese año ganamos el “sector” provincial y jugamos el “regional” en Toledo coincidiendo en ese equipo con Rubén Benita y Carlos Aguilar que luego jugarían en el equipo de Asobal.
Pasada mi etapa juvenil paso a jugar al otro equipo de la capital, el Balonmano Cuenca. Equipo que militaba en la 2ª División Nacional. Eso significaba viajar cada dos fines de semana por toda Castilla la Mancha a localidades como Puertollano, Ciudad Real, Toledo, Villarrobledo, Guadalajara …. Recuerdo el debut en la competición en Pedro Muñoz contra su Deportivo Retamar, al mando el “gran” Dimas. Mis compañeros le tenían siempre ganas porque solíamos perder por la mínima, y esta vez la cosa no iba a cambiar. Después de hacer una gran primera parte volvimos a perder de 1 en los últimos minutos.
El inicio de la temporada 1998/1999 es de triste recuerdo para mi. Partido amistoso en Chinchón, último minuto del encuentro y yo sentado en el banquillo porque el partido estaba ya decidido para el equipo de casa. El mister me llamaba porque había habido una exclusión y alguien tenía que salir. ¡¡¡Maldito último minuto!!! Al intentar fintar a un rival, resbalo y la rodilla cruje. En una primera exploración el medico dice que puede ser un esguince de rodilla y que guarde reposo 2 semanas con un vendaje. Pasado ese tiempo me hacen una resonancia y los resultados son los peores que se podían esperar : rotura del ligamento cruzado anterior y los dos meniscos de la rodilla derecha. Adiós a una temporada ilusionante y adiós a la posición de lateral izquierdo… desde entonces pasaría a jugar de pivote.
La temporada 1999/2000 fue la mejor campaña que hicimos. Había un buen plantel de jugadores y nos habíamos reforzado con varios jugadores que pasaban a senior del Ciudad Encantada. Por cierto, en aquel equipo militaba el actual entrenador del Liberbank Cuenca, Lidio Jimenez. Esa temporada logramos acabar en segunda posición solo superados por el ADC Ciudad Real, un equipo donde jugaban Paco Romero, Gustavo Alonso y Quique Plaza.
El descenso esa temporada del Balonmano Ciudad Encantada a 1ªDivisión hace a su vez que el Balonmano Cuenca desaparezca en categoría senior ya que el Ciudad Encantada se nutre de la mayoría de jugadores del Balonmano Cuenca, con lo cual mi trayectoria en el equipo acaba en esta temporada.
Seguía ligado al balonmano porque entrenaba con mis antiguos compañeros para no dejar de practicar este deporte y echarles una mano en los entrenamientos. Ese primer año compartir vestuario con hombres como Josemi, Frantsouzov o el “mitico” Papitu. Para mi era toda una gozada el poder entrenar con todo un campeón de Europa y que te contase historias de balonmano en los viajes. Esa primera temporada en 1ªnacional el equipo quedo encuadrado en el grupo C con muchos equipos catalanes como Gava, espectacular equipo formado por jugadores que habían militado en el Barcelona como Ulpiano y Bayo entre otros, Bm la Roca con el gran Aleix Franch, o Puerto Sagunto con el pivote Juan Selma. Recuerdo el viajar a una pista como Bordils, al lado de la frontera con Francia, y estar más pendiente del olor a butifarra a la plancha que salía del bar que del mismo partido. Importaba poco levantarse a las 5 de la mañana de un sábado y volver a las 3 o 4 de la mañana del domingo.
La temporada siguiente, 2001/2002, el equipo queda encuadrado en el grupo D con nutrida presencia de equipos andaluces. El equipo necesita gente para completar las fichas y deciden hacerme ficha. Vuelvo nuevamente a jugar competición. Recuerdo mi debut en 1ªNacional en Moguer ante el Pedro Alonso Niño. Hicimos una primera vuelta muy buena, habían dejado el equipo tanto Frantsouzov como Papitu y llegaron Alberto Bravo y Domínguez Capa. Solo una derrota en el ultimo partido de la primera vuelta en casa frente a Antequera nos privó de acabar en la 2ª posición en esa primera vuelta. Finalmente el equipo acabaría en quinta posición. Recuerdo que también había grandes equipos como Baena con los hermanos Gonzalez Colorado y un jugador de Cuenca como David Mendoza, Algeciras con Juan Bermejo, Baro, Camacho Palacin…. o Antequera con el pivote Alejandro Rubiales. La verdad es que se notaba mucho la diferencia de jugar en segunda división a primera y por supuesto el nivel de balonmano que existía en esa categoría por aquella época. En la siguiente campaña el equipo intenta profesionalizarse un poquito más con la llegada de Nino Antúnez al banquillo y dejo el equipo y la práctica del balonmano en pista por el momento.
Pasan los años y el gusanillo del balonmano sigue dentro de mi ,así que solía bajar de vez en cuando a entrenar con el equipo de 2ª del Balonmano Ciudad Encantada para no perder la práctica deportiva. Hace 4 años, la falta de jugadores dentro del equipo hace que me propongan hacerme ficha para poder sacar el equipo adelante. ¡¡¡Madre mía que locura!!! Un equipo con una media de edad de en torno a 23 años y llego yo con 40 para volver a las canchas de Castilla la Mancha. Se notaba la larga inactividad y mas que nada servía como de segundo entrenador a mis compañeros de equipo. Y aquí tengo una anécdota que me gustaría contar en un partido contra Cobisa, equipo que solía dominar el campeonato. Nos toco un arbitraje casero casero, y perdiendo de 10 goles nos expulsan de manera rigurosa a dos jugadores, una de ellas por supuestamente no salir en el cambio por el lugar exacto. No se les ocurre a mis compañeros nada más que decir que no querían jugar más y que querían abandonar el partido. Nos tuvimos que poner Jorge el entrenador y yo a calmar los ánimos para que no abandonasen el encuentro ya que nos enfrentaríamos a una sanción….era la diferencia, ahora tenía que ser un “padre” para ellos, con lo que yo había sido (risas).
Y bueno, llega la temporada 2018-19 donde, debido a mi lugar de trabajo mi “gran” amigo Óscar me ofrece el jugar la liga de Veteranos de la Comunidad de Madrid. Para mi una experiencia nueva porque como dije antes, nunca había jugado en un equipo fuera de Cuenca. La verdad que fue una temporada excelente, no importaba el hacer 80 kilómetros para desplazarme a entrenar a Azuqueca y los fines de semana a Madrid para jugar los partidos. Allí compartí vestuario con gente muy maja y que enseguida me hicieron uno más del equipo ya que la mayoría de ellos habían sido compañeros en equipos de la provincia de Guadalajara. Gente como Pendy , Besga, Jimmy, José, Óscar, Tavi, Gus, Raúl…… y como no, nuestro “gran” delegado Juanmi Pantoja. Una temporada en la que no perdimos un solo partido: 18 partidos consecutivos ganados. Jugar contra gente como Bujan, ex de Villa de Aranda o Melilla, Mariano, uno de los “chaches” con los que he coincidido en el balonmano playa, Ruben Esteban portero que jugó en Cuenca una temporada después de que yo dejase el equipo… Sigo pensando, pero no quise decírselo en su momento, que gran parte de que consiguiéramos eso fue el espíritu competitivo que nos sacaba Óscar a cada uno de nosotros porque por muy bien que pensáramos que lo podíamos haber hecho siempre había algo a lo que le sacaba punta. De ahí una frase celebre: “tienes las mismas Copas de Europa que yo” (risas).Una experiencia inolvidable que espero que en un futuro no muy lejano pueda repetir si vuelven a hacer equipo y siempre que mi físico me lo permita.
Y hasta aquí mi carrera en el balonmano en pista.
Pero como buen amante de “nuestro” deporte no podía dejar de hablar de mi carrera como jugar de balonmano playa. Me acuerdo que fue en torno a 1998 o 1999 cuando nuestro delegado de equipo en pista, Pedro García el “Barbas”, nos propone ir a Pilar de la Horadada a jugar un torneo de balonmano playa en el verano. Figúrense ustedes un equipo de Cuenca, “sin” playa, ir a practicar este deporte. Era la primera vez que jugábamos aunque si habíamos oído hablar de ello. Equipos de Tenerife, Pais Vasco, Orihuela,…….goles espectaculares que valían el doble, goles del portero que tenían el mismo valor y en fly del portero triple. Bueno, algo nuevo para nosotros que veníamos de la pista. Aquel equipo formado por Chafe, David, Lidio Jiménez o Castillo entre otros, fue capaz de llegar a la final de ese torneo y solamente un virus estomacal hizo que jugáramos mermados y la perdiéramos en los shoot out. Esa experiencia tan gratificante hizo que posteriores veranos el núcleo o la base de ese primer equipo de balonmano playa de la provincia de Cuenca fuera participando en diversos Campeonatos de España de Balonmano Playa como en Mazagon, Barbate o Pilar de la Horadada y participar en los torneos del Tour Balonmano Playa de Cullera, Peñiscola, Alcala,…. Me quedo con el nombre que tenía nuestro equipos: “LOS GALOS” . Y es que teníamos una “pócima” especial para los partidos (risas).
Pues hasta aquí mi historia o mi carrera como jugador de balonmano. Sigo ligado al mundo del balonmano porque no falto o intento no faltar a ningún partido del equipo de mi ciudad, Liberbank Cuenca, animando con su gran peña “Furia Conquense”. Incluso ha hecho que visitase alguna ciudad europea para seguirlo en directo.
No quería cerrar esta historia sin nombrar a la persona que ha estado a mi lado todos estos años que he narrado: Elena. Ella ha sido siempre y es, mi fan número uno.
Un saludo y nos vemos en las pistas.”
Un tipo espectacular y el mejor anfitrión que uno puede tener si visita la preciosa ciudad de Cuenca. No duden en tirar de él porque estará encantado de recibir a todo buen aficionado al balonmano.
Un fortísimo abrazo Manuel.
