Entrevista a NOELIA ONCINA - BalonmanoVeteranos.com

Bueno, en realidad mi primer deporte siempre ha sido el balonmano. Comencé a jugar como casi la mayoría en la época, en mi colegio. Era el deporte que allí se hacía y además mi hermana lo practicaba y me gustaba mucho, así que en cuanto pude, a los 8 añitos, empecé a jugar.

El tema del Atletismo vino mucho después, y no llegó a durar apenas una temporada. Después de mi primer año fuera de casa, que jugué en Balonmano Golosinas Fini de Molina de Segura, me sentía que estaba algo baja de forma y que el cuerpo me pedía entrenar más, así que llamé al que había sido mi preparador físico en el Colegio Europa y en  el Costa del Sol , Luis Moreno, y me puse a entrenar con él. Como hacía atletismo, a veces entrenaba con ellos y bueno, vieron que ese verano podía competir en algo si me gustaba. Y así lo hice. Me puse a hacer longitud y triple salto. Pero en realidad nunca antes había realizado atletismo. Incluso quedé subcampeona de Andalucía. Disfruté muchísimo de la experiencia, pero en cuanto me llamó otro equipo de balonmano, no dude.

Creo que lo has dicho ya un poco (risas). Soy competitiva, y me sale dar el 200%, a veces mejor y otras no tanto, pero siempre con mucho corazón. Me considero  una jugadora  incansable en defensa, y rápida y explosiva en ataque, que quizá suplía algunos de mis déficits con mi condición física.

MÁLAGA COSTA DEL SOL: Nuevo club que se crea en el año 1994 con jugadoras de diferentes equipos de Málaga. Y ese primer año, se asciende a División de Honor. Al año siguiente bajamos de nuevo a Primera División, pero la experiencia fue muy buena ya que estás jugando con gente que conoces de hace muchos años. Un club nuevo donde nos faltaba experiencia.

MOLINA  DE SEGURA: Club humilde, algo desestructurado para jugar en la máxima categoría.

SIERRA NEVADA: No tuve una buena experiencia, ya que tuve que volver a casa a los 3 meses de estar allí.

VÍCAR: Club que sale de un colegio, con el esfuerzo que eso conlleva. Es un club al que le tengo un cariño especial porque creo que además de llevarme gente maravillosa, comencé a fraguarme como jugadora y empezar a tener algo más de experiencia en las pistas.

OSITO L´ELIANA: El mejor club de balonmano femenino que ha tenido España hasta la fecha, y   club con Cristina Mayo a la cabeza que comenzó a profesionalizar nuestro deporte.

SAGUNTO: Sigue siendo en definitiva el Mar Valencia, pero en otro pueblo.

Sí, 10 años, y no me hubiese importado que fueran más. Cristina como entrenadora, exigía en cada entrenamiento y en cada partido el máximo, pero es que tus compañeras también. Así que los entrenamientos eran de estar concentrada en cada momento.  En ese equipo no valía estar a medias. Cuando quieres resultados, el nivel de exigencia es mayor. Tienes que ser fuerte de cabeza para saber llevar bien cada día de entrenamiento. Con Cristina he llorado, he reído y sobre todo he aprendido muchísimo. Y si hay un cabreo o lo que sea en el entreno, se queda en el entreno. Fuera de las pistas nos damos un abrazo y ya está.

Con Cristina me di cuenta que era más fuerte de lo que pensaba. Creo que las que hemos tenido la suerte de estar con ella, tenemos mogollón de anécdotas (risas).

Eso sí, luchadora incansable de nuestros derechos, a Cristina se le deben muchas cosas que se han conseguido en el balonmano femenino.

Que recuerde en estos momentos, mi primera liga. Cuando llegas de novatilla a uno de los mejores clubes y ganas una liga. Eso  fue muy emotivo.

El más inesperado y más celebrado, quizá, la Copa de la Reina que ganamos en Estella.

También recuerdo doloroso, la final de la Champions contra el Krim, donde ganamos en casa, pero allí no pudo ser.

Bueno, para  mí las derrotas siempre eran amargas , pero con matices. Depende mucho de como pierdas, de cómo hubieses afrontado el partido y si pudiste ayudar al equipo con lo que tú querías o ese día no te salían las cosas. Estás en un equipo de alta competición, donde puede que tu rival sea muy superior a ti, y aun así lo peleas.

El hecho de la derrota, me hacía tener muchas más ganas de volver a entrenar para poder seguir mejorando cosas  en el equipo y a nivel individual.

Jugar en un Selección es algo que siempre te llena de ilusión, sobre todo la primera vez que te llaman porque además era algo que no tenía en mi mente, era  como algo inalcanzable. Juegas a balonmano porque es tu pasión, y si te llega el regalo de poder disfrutar de la Selección, lo vives a tope. La primera vez que te vistes con la camiseta de España y escuchas el  himno, los pelos de punta.

Me tocó ser capitana en una etapa de la Selección que fue el comienzo de ”LAS GUERRERAS”, en la que tuvimos que luchar , ya no solo en las pistas, sino fuera de ellas para que se nos tratara en las mismas condiciones que a los hombres. Había muchas cosas que cambiar, y fue complicado, pero viendo lo que se ha conseguido, me encanta ver las posibilidades que tienen ahora las jugadoras de entrenos, materiales, ropa, prensa, etc… Que creo que ellas mismas no saben de qué no hace tanto, todo eso nos costaba la vida.

Los Juegos Olímpicos de Atenas fueron maravillosos. Cuando llegas a una Villa Olímpica por primera vez y te ves rodeada de deportistas, que muchos de ellos son tus ídolos, que puedes comer a su lado, que charlas, etc… Son experiencias inolvidables. No sé si será eso de Espíritu Olímpico o qué, pero las veces que he estado, he intentado exprimirlo al máximo.

He tenido la suerte de estar en 2 Juegos más, aunque esta vez como delegada de equipo, que aunque es cierto que no tiene nada que ver, solo estar allí merece la pena siempre.

Bueno, mi retirada fue dolorosa pero la vi venir. Desde mi primera operación, vi que la rodilla no iba bien. Siempre tenía problemas, sufría entrenando y jugando, no salía de un dolor para tener otro, meterme en quirófano varias veces…. Así que ya terminas esa temporada, que apenas has podido jugar, sabiendo que se acabó.

Con los meses no me lo tomé tan mal. Intento mirar siempre el lado positivo. Me dediqué hasta los 34 años a hacer lo que más quería, que era jugar a balonmano, haciéndolo al máximo nivel… quien me lo iba a decir. Y además pude llevarme experiencias, aprender valores, amigos para toda la vida. ¡Que más quiero!!!!

Solo en mis últimas 2 temporadas tuve lesiones graves de pasar por quirófano. Se que hubiese podido estar dando guerra unos cuantos años más, pero es que las lesiones son parte del deporte, y por mucho que una quiera, cuando te llega algo así, no puedes hacer mucho, tienes que escuchar a tu cuerpo.

Pues al principio es duro porque además, hacía mucho tiempo que no estudiaba, y me costaba bastante la rutina diaria. Después todo fue más fluido. Al terminar la carrera fue difícil y duro encontrar trabajo teniendo mediana edad y sin experiencia laboral.

Sí que es cierto que todo lo que aprendes en tu carrera deportiva te sirve para tu vida profesional, pero encontrar trabajo es difícil.

Estás acostumbrada a trabajar en equipo, eso siempre se valora, al estrés, a querer sacar lo mejor de ti, al compromiso… Son tantos los valores que nos da el deporte!!!

Al acabar la carrera de Fisioterapia, mis primeros años me dediqué a la fisioterapia deportiva, primero con las categorías inferiores de la Federación Española de Balonmano y al año siguiente  en el Club Balonmano Guardés.

Ahora trabajo como fisio en un Centro de Día con personas mayores y soy feliz. Me encanta este sector que era totalmente desconocido para mí.

Echando la vista atrás, en todos los sentidos eran otros tiempos. Tuve la suerte de vivir los buenos momentos del balonmano en España, y creo que estaba mucho más profesionalizado que ahora. Cuando llega la crisis a un país, al final, los deportes minoritarios y sobre todo femeninos salen muy perjudicados. Parece que de nuevo empieza un poco a despuntar, pero aún estamos muy lejos de volver a tener una Liga que pueda competir fuerte en una Champions, por ejemplo.

Jorge Dueñas llegó a la Selección y supo sacar todo lo mejor de nosotras. Además de una gran Selección, Jorge sacó un gran grupo humano, que al final es la clave para que las cosas funcionen bien. Al conseguir la primera medalla, fuimos conscientes de que podíamos competir con cualquiera, que podíamos tener nuestras limitaciones, pero nuestra garra no podía faltar.

Hablando de balonmano, pienso que se juega  mucho más rápido y quizá tácticamente más rico que antes. Jugadoras físicamente trabajadas y con más medios en general para trabajar bien.

Pues es que ahora es una maravilla el tema de la visibilidad de nuestro deporte en comparación con nuestra época. Pero es cierto que antes no existían ni las redes sociales y apenas televisaban algo. Pienso que es un gran paso para el deporte femenino en general y para el Balonmano en particular, que podamos tener algo que decir dentro de la sociedad.

Es curioso, antes con menos visibilidad en los medios había más apoyo económico y ahora que se tiene la posibilidad de que te vean por muchos sitios, tenemos un déficit importante en la mayoría de los clubes.

En España todavía nos queda recorrido, y se pueden conseguir muchas cosas, pero hay que seguir luchando y trabajando muchísimo para ello. Es cierto que en los últimos años hemos tenido el apoyo de la Federación, que antes nos costaba sudor y lágrimas.

Que DISFRUTEN de lo que hagan. Para mí, bajo mi humilde opinión es lo más importante. Si no disfrutas, todo lo demás que puedas tener en mente, no vendrá.

Que sean constantes en su trabajo, que el compromiso y la dedicación sea su día a día. Y que recuerden que jugamos a un deporte de equipo, en el cual sin tus compañeros/as, entrenadores/as, etc… no somos nadie.