Primer año, después de más de una década y media, en el que no has tenido pretemporada ni calendario de partidos apretado a estas alturas del calendario… ¿Se echa de menos? ¿Qué es lo que más añoras de tu reciente etapa como jugador profesional? ¿Cómo te quitas las ganas de balonmano, que seguro que sigues teniendo?
Siempre se hace raro no poder realizar una cosa que se hace todos los días y encima durante tantos años. Pero tengo que decir que no eché de menos no tener que empezar otra pretemporada más. Me encontraba de vacaciones con mi familia y evidentemente en ese momento me encontraba mejor que haciendo pretemporada.
Encima el último año no fue bueno y sentí que no podía seguir así. Llevaba una vida demasiado ajetreada y con mucho estrés lo cual no me permitía ya rendir al nivel que me gustaría.
Lo que más echo de menos es el ambiente de equipo, el realizar viajes y compartir horas de autobús jugando a cartas, contando historias, los terceros tiempos después de los entrenos…
Todavía no he tenido tiempo de quitarme esas ganas de balonmano. De momento no lo necesito, vivo bien como estoy pero seguro que más adelante llegará.