Vamos por partes, querido Falo, hablas de la guitarra y lo que te puedo decir es que hace bastantes años que ya no la toco, fundamentalmente por no perder prestigio. Es una prueba más de que el entrenamiento debe ser constante e intenso y si no, no.
Y esta comparación me sirve para responderte a la pregunta que me haces.
No me voy a esconder, entre otras cosas porque hace tres años publiqué una serie de artículos con el título común de “Algo que me preocupa”, que no dejarían que me escondiera ahora; en ellos hablaba de la zozobra con la que veía la evolución en la base y no hablaba de la calidad, tenemos entrenadores muy preparados, hablaba de los hábitos que, de forma prioritaria, se estaban estableciendo. No te voy a dar detalles, lo sintetizo en una frase
¡¡EL VOLUMEN DE ENTRENAMIENTO EN LOS EQUIPOS DE BASE HA IDO DESCENDIENDO SIGNIFICATIVAMENTE!!
No quiero discutir de formas de entrenamiento. El Alto Rendimiento se sustenta en tres pilares: La cantidad de trabajo, la calidad del mismo y la selección adecuada de la “materia prima” (buenos criterios de selección de jugadores)
Es como un banco de tres patas, si falla un soporte, se cae. Y tengo la sensación de que al menos uno de los soportes está empezando a flaquear, estoy muy preocupado por la disminución del trabajo, porque es uno de los cimientos de la competitividad.