Junto al mítico Rolando Urios, eres el pivote más desequilibrante del balonmano moderno. ¿Cómo llega uno a ser el mejor pivote del mundo y uno de los mejores de toda la historia de nuestro deporte? ¿Es uno consciente de ello, o le das una importancia relativa?
No me gustan nada ese tipo de etiquetas o clasificaciones, creo que ha habido y hay grandes pivotes, por eso no le doy ninguna importancia.