Entrevista a GUSTAVO ALONSO - BalonmanoVeteranos.com

Jugar en el equipo de mi ciudad fue un sueño hecho realidad. Cuando era niño y veías tanto por televisión como en la Albericia a esos jugadorazos solo pensaba en llegar a jugar algún día en ese equipo y esa liga.

El Teka Cantabria, a nivel nacional e internacional, ha sido uno de los equipos más laureados de la historia de nuestro balonmano y por tanto un lujo haberlo tenido en casa.

Me da mucha pena como dejaron morir el club, más aun habiéndose salvado en la última jornada contra Ademar. La desaparición fue en los despachos, por aquella época  había más equipos en peor situación económica que el Teka Cantabria, no sé el motivo real o los intereses que se  tenían en que desapareciese.

GALDAR: Fue mi primera experiencia fuera de casa. Al principio me costó adaptarme tanto al juego como al clima de Canarias. En la primera vuelta de la liga perdíamos casi todos los partidos por un gol, daba igual contra quien fuese. La segunda vuelta, tanto en lo personal como a nivel de equipo, mejoramos un montón. Creo recordar que solo perdimos 3 o 4 partidos. Una pena que el equipo también desapareciese .En cuanto a Galdar destacaría su clima y la tranquilidad que se vivía.

ALMERÍA: Llegamos de Galdar 5 jugadores: Dani Sarmiento, Kobin, Rajic, Israel Perez Ariza y yo. Tengo grandes recuerdos. Pasé tres años allí, haciamos un balonmano muy dinámico y vistoso. De Almería también destacaría su clima, el poder pasear o sentarte en una terraza en invierno en manga corta es todo un lujo.

LOGROÑO: Un equipo recién ascendido con una afición y una ciudad volcada con el club. Una gran experiencia, uno de los mejores clubes donde he estado tanto por su directiva como por todo lo que lo rodeaba. Una ciudad pequeña donde todo lo tienes a mano y con gente súper amable y campechana. Actualmente todavía tengo grandes amigos.

VIGO: Pase dos años en el Academia Octavio. El primer año deportivamente hablando fue un gran año y nos metimos en Copa del Rey. A partir de ahí llegaron los impagos y todo fue a peor hasta que el segundo año descendimos. Personalmente la peor experiencia que he tenido en un club. Me dejaron 10 meses sin pagar. Finalmente tuve que acudir a los juzgados y pude cobrarlo al cabo de 3 años, lo pasé fatal. De Vigo destacaría sobre todo su gastronomía, se come muy, muy bien.

Mihail Yakimocich, Ivano Balic y Alberto Entrerrios por su calidad técnica y táctica son los que más me han impresionado. Con Misha tuve la suerte de compartir vestuario, para mí sino el mejor uno de los mejores jugadores ofensivos de la historia. Lo tenía todo, calidad de pase, toma de decisión, lanzamiento exterior  y también poseía un gran físico.

Por otra parte Balic., al que verle jugar era todo un espectáculo. Súper inteligente en la pista, con una calidad de pase y juego con el pivote sensacional.

Alberto otro jugador 10, técnicamente y tácticamente buenísimo, también defendía, jugador físicamente muy potente.

En cuanto a su poder físico, Julio Fis era todo un portento. Lla primera vez que contacté en defensa con él, salí rebotado. Era un jugador al que le tenías que defender con todo porque si no, no le parabas.

Lo mismo que Andrey Chepkin con sus 2,10 y 125 kg, era un tío durísimo, en mi primer enfrentamiento contra él me impacto bastante su poderío.

También me gustaría nombrar a Didier Dinart, un defensor increíble ,rápido,  inteligente y duro a su vez. Buenísimo en el 1×1, blocando balones e interceptando, para mí el mejor defensor de la época.

De compañeros, podría destacar a muchos de ellos,  el balonmano me dejó grandes amigos con los cuales todavía tengo contacto. No quisiera destacar a nadie porque para mí la mayoría han sido importantes dentro del vestuario.

Como he dicho anteriormente para mí fue un sueño llegar a jugar con auténticas estrellas del balonmano. Todo fue muy fácil ya que eran personas súper sencillas. Aquel vestuario era como una familia, el éxito de ese equipo fue el grupo, aparte de ser un gran equipo deportivo. Nos llevábamos genial tanto dentro de la pista como fuera de ella, nos juntábamos para comer los fines de semana o salir de vez en cuando.

La verdad que aun así siempre hemos sido unos profesionales, nunca dejamos de entrenar. Pero quieras o no, en el rendimiento eso se notaba. No tenías la cabeza donde debía estar, sobre todo cuando la deuda era ya excesiva como en el Academia Octavio de Vigo.

Mucha culpa a parte del club la tuvimos nosotros por no plantarnos. En otras ligas como Francia o Alemania no te dejan salir a competir sin sus presupuestos íntegros.

Desde pequeño me llamó la atención el trabajo de pesas. En mi barrio había un pequeño gimnasio donde me fijaba en los entrenamientos, al verlo por primera vez le dije a mi hermano, que era el que veía los entrenos conmigo,  “yo también quiero ponerme así de fuerte”.

Como bien dices el trabajo físico es muy importante en nuestro deporte. Yo empecé con el trabajo de pesas a los 16 años, pero no te voy a mentir, siempre fui para mi edad un chaval fuerte.

Cuando era profesional, por mi cuenta visitaba el gimnasio una o dos veces más por semana, dependiendo de lo que trabajara en el equipo.

Todavía me gusta entrenar, ahora lo hago en casa tengo un pequeño gimnasio. Llo hago unas 3 veces por semana pero con mucho menos intensidad que cuando estaba en activo.

Por suerte o por desgracia he tenido multitud de entrenadores, casi tanto como temporadas en activo, de todos ellos he aprendido algo.

Destacaría a tres de ellos: Jordi Ribera, Jota González y Quique Domínguez. Son unos auténticos maestros y estudiosos del balonmano. La verdad que aprendí muchísimo de ellos y desde aquí se lo agradezco.

En cuanto a gestión de grupo pienso que Tinin Pastor y Luis Toscana en mi primer año en el Teka Cantabria lo hicieron extraordinariamente bien. Conseguimos los dos últimos títulos para el club: Copa Asobal y Recopa de Europa.

Por supuesto que para mí es el mejor deporte del mundo, es una disciplina que te exige físicamente estar preparadísimo, gente de muchos kilos y envergadura, moverse con la velocidad y explosividad que lo hacen, a la vez tienes que estar muy fuerte para aguantar esos duros contactos durante los 60 minutos. Por no hablar de la intensidad a la que se desarrolla un partido. Si, físicamente tienes que estar preparadísimo, mentalmente, tácticamente y técnicamente todavía más. El balonmano es un deporte de mucha intensidad en el cual se juega muy rápido, eso te exige pensar en milésimas de segundo para tomar la mejor decisión posible. Con todo ello destacaría la nobleza que tiene nuestro deporte, a pesar de la dureza que tiene, acabas de competir y todos amigos.

Sigo ligado al balonmano entrenado en la categoría juvenil del SDC ASTILLERO. La verdad que disfruto muchísimo viendo cómo evolucionan los chavales.

Desde mi retirada no he vuelto a vestirme de corto, la verdad que me encantaría pero no es posible, mis rodillas no me lo permiten.

En cuanto a la liga Asobal si la sigo, cuando puedo acudo a la Alberícia a ver al Sin Fin en el cual tengo buenos amigos y  lleva unos años haciendo muy buenas temporadas.