Casi 20 años de trayectoria profesional, que no están al alcance de muchos jugadores en un deporte tan exigente en lo físico como es el balonmano. ¿Cuál crees que ha sido la clave de una carrera tan longeva? ¿Qué porcentaje se debe a haberse cuidado mucho y qué porcentaje corresponde a la fortuna con las lesiones?
Una de las claves sin duda ha sido la inversión a largo plazo que he hecho en el terreno físico, como bien dices. Hay algunas lesiones que no puedes evitar pero si minimizar, preparando al cuerpo para las exigencias de un deporte tan duro como el balonmano. Desde mis inicios siempre me fijé en como trabajaban físicamente algunos de mis compañeros de equipo, como Thomas Svensson o Mateo Garralda y como ello les permitía vaciarse después en la pista. Fueron dos de mis grandes referentes y de hecho lograron tener una carrera muy longeva.