Casi 20 años como jugador profesional de balonmano, y en la posición de pivote donde el contacto, los golpes y los empujones son continuos. ¿Dónde estuvo el secreto para estar tantos años en activo y a ese gran nivel?
Probablemente sea una mezcla de suerte, profesionalidad y pasión por nuestro deporte. Comencé a jugar al balonmano en un club a los 16 años y después de haber probado varios deportes, como por ejemplo el fútbol.